¡Cómo duele ver a tres compañeros caer por la irresponsabilidad de otros!
Los que alguna vez vestimos el overol amarillo con una bomba de mano en la espalda, sabemos lo que se siente cuando te quemas los pies porque los bototos están en mal estado, o te caes sobre las brasas y te das cuenta que el traje no es ignífugo.
Pero no para ahí la cosa, porque siempre hay algún cabeza de músculo que te manda a atacar el fuego de frente ¡para que te hagas hombre! Dicen…
No sé si fue eso lo que pasó con Ricardo, Wilfredo y Sergio. Lo que si se es que estaban en el lugar equivocado y quien debió haber previsto eso, no lo previó.
Combatir un incendio forestal, con árboles enteros incendiándose, con palas, rastrillos y ahogadores, tragando humo hasta decir basta, después de haber subido el cerro por dos o tres horas, no es una experiencia muy linda. Pero a uno solo lo anima la satisfacción que se siente cuando los focos ya están controlados y cada brigada y cuadrilla hizo correctamente su trabajo. ¡Ahí sí que se siente sabroso el juguito en sobre adentro de la cantimplora! Si te toco dirigir un combate, que te llene de orgullo saber que distribuiste bien el trabajo y cuidaste a tus hombres.
Pero esta experiencia que les narro, ¡ES DE HACE CUARENTA AÑOS!
¿Y me van a decir que hoy, los brigadistas aun se queman los pies y los brazos y piernas por el roce con ramas ardiendo? ¡Qué me hablan de protocolos y que todo se hizo correctamente! Si así hubiese sido no lamentaríamos estas muertes y los heridos, y los hijos huérfanos.
En algún momento del combate la ineptitud estuvo por sobre el raciocinio y el conocimiento. No se perdió material de combate, se perdieron vidas, así que los jefes deben responder.
De igual forma, me rebelo contra la vergonzosa asignación de recursos que llega a las brigadas y brigadistas, mientras los jefes regionales se gastan el presupuesto en horas en helicóptero, camionetas equipadas full y multiequipo personal. Algo tendrán que decir el Director Regional y el Nacional.
Aarón, no nos basta con las disculpas y los pésames.
¡QUE LOS RECURSOS Y PRESUPUESTOS LLEGUEN REALMENTE HASTA QUIENES COMBATEN CUERPO A CUERPO CON LAS LLAMAS!
Mario Alvarado Eva, Ing. Forestal, Director de www.putaendouno.cl