Se rastrea intensamente para encontrar el resto del cuerpo.-
En la tarde de este miércoles, el dueño de unas pesebreras se percató que uno de sus perros llevaba algo en su hocico, con lo cual jugueteaba. Al acercarse se dio cuenta que era la cabeza de un bebé de pocos días. De inmediato alertó a Carabineros de Santa María, quienes iniciaron las primeras pesquisas.
Posteriormente, el fiscal Osvaldo Basso, dejó las indagaciones a los peritos de la PDI y el subcomisario de la Brigada de Homicidios, Carlos Alegría, confirmó que se trataba de los restos de un lactante, de aproximadamente dos semanas de vida y se inició la búsqueda del cuerpo. Además, los detectives indagarán como llegó al predio. Para ello se inició un rastreo en los hospitales y consultorios de Aconcagua, con el fin de chequear quienes acudieron a control prenatal e ir cerrando el cerco.
También, en el Servicio Médico Legal se realizará una un examen de ADN a los restos para luego compararlas con los que resulten ser sus progenitores.
(Cp/P1/Foto portada CHV: Subcomisario Alegría y efectivos de la BH de Aconcagua)