Esa es parte de la historia de Lucy Ana Avilés (foto izq.), una psicóloga chilena radicada hace diez años en Estados Unidos donde vive con su marido Benjamin Walton, a quien conoció en Chile hace 15 años. Su aporte en concreto servirá para ayudar a combatir los incendios forestales de la zona central.

Tras días de gestiones con el gobierno, el aporte de Lucy y su marido llegará mañana: el avión Supertanker aterrizará en la madrugada en Arturo Merino Benítez, tras 12 horas de vuelo desde Colorado. La nave tiene capacidad para almacenar 73 mil litros de insumos para combatir las llamas, que por su intensidad obligaron al gobierno a declarar zona de catástrofe en los lugares afectados.

Pero no es que la gestión haya sido simple. Y es que en un comienzo recibieron una negativa de las autoridades para poder traer el avión, que es, entre otras cosas, considerado como el mejor de su tipo, el de más efectividad y alcance.

“La idea nos nació al ver todos los días que han pasado y que no se ha logrado tener mucho control de los incendios, por las altas temperaturas y los vientos. También porque a lo mejor ha habido un poco de lentitud de tomar decisiones y contar con los recursos necesarios”, señala.

Los contactos con las autoridades chilenas comenzaron el sábado. “Eso no nos favorecía mucho por el día, pero sin embargo estuvimos empujando dentro de las posibilidades. Logramos comunicarnos con la Onemi, con la Fach, la Conaf, y la verdad es que los comentarios eran que no servía el avión”.

“Preguntamos porqué y no pudieron dar con una respuesta, muchos opinando que el avión no iba a servir por el tipo de geografía de Chile, muchos opinando sin conocer el avión”, explica.

Según Lucy Ana, el Supertanker es una nave única, solo hay un ejemplar en el mundo y en otras oportunidades ha sido solicitada por los gobiernos de otros países. “Está hecha con una sofisticación que ningún otro avión similar tiene”, dice.

La máquina ya fue ocupada en Israel y Australia, por ejemplo, para combatir incendios de gran magnitud. Por esto es que la filántropa chilena indica que “la geografía no es una razón por la cual este avión no pueda funcionar en Chile: Si bien es dramática, nuestra geografía no es única en el mundo”.

En la misma línea, agrega que el avión puede volar a muy baja altura y cuenta con una tecnología única.

Pero finalmente el ofrecimiento fue aceptado y el director ejecutivo de la Conaf le manifestó en una carta que el Supertanker sería probado por dos días, para ver cuáles son sus resultados en el combate.

Lo de los dos días no le fue indiferente. “Me parece doloroso”, manifestó Lucy. “Doloroso por los bomberos, por los voluntarios que están sufriendo las consecuencias. No contamos con los recursos que debiésemos para atacar los incendios de esta intensidad y los kilómetros que está abarcando, y que nos pongan a prueba en vez de abrir las puertas y tomar ventajas de esta donación me duele y me parece incomprensible”.

La donación

La donación comprende el envío del avión Supertanker desde Estados Unidos y tendrá un costo de dos millones de dólares como tope.

“Solo el traslado de ida del avión cuesta 400 mil dólares, y el de vuelta otros 400 mil dólares”, cuenta Lucy.

Además correrán con los gastos para las 12 personas que son parte del staff.

Con los dos millones de dólares se podría operar entre cinco y seis días.

“Si el gobierno y alguien facilita el agua, la bencina y los costos de tener estacionado el avión en la loza del aeropuerto, se podrían aumentar los días, pero hasta el momento no se ha hecho ningún ofrecimiento”, indica.

El avión

Se trata de un Boeing 747-400 que cuenta con una capacidad de 72.672 litros de agua en su interior para combatir las llamas de los incendios, es decir, 20 veces mayor capacidad que las aeronaves cisterna que actualmente utiliza la Conaf en el país. Además cuenta con la capacidad de utilizar retardantes, espuma, gel o agua según las condiciones del incendio lo requieran, y tarda sólo 30 minutos en recargarse para continuar sus labores de combate contra las llamas.

Respecto a la operación en Chile, el vicepresidente senior de Global Supertanker, Bob Soelberg, señaló que “muy posiblemente llevaremos nuestro propio piloto, quien está altamente entrenado y cuenta con el conocimiento para realizar todo tipo de maniobras en el combate de incendios y asegurarse de que estos aviones operen de manera efectiva y segura en los incendios”.

Ante la alta cantidad de focos que se encuentran activos en el país, Soelberg señaló que “dependerá de lo que las autoridades locales crean que son los incendios más peligrosos y cuáles son los más controlables.

La aeronave además, es capaz de operar por cuatro horas de manera autónoma por sobre las llamas -con la capacidad completa de agua-, entregando una ayuda a los voluntarios y expertos de Conaf que trabajan en terreno para combatir los incendios.

Global Supertanker asegura que el avión es capaz de bajar lo suficiente para realizar las maniobras necesarias, así como efectuar delicados acercamientos para depositar el agua y el retardante que ayuda en las labores de combate de las llamas.

Según explicó la empresa, el avión cuenta también con diversas formas de operación que se adaptan a las condiciones de cada incendio.

Respecto a la recolección de agua, Soelberg comentó que en ocasiones anteriores han sido las autoridades locales y el departamento de bomberos los encargados de suministrar la cantidad de material necesario para operar en el país, pero explicó que esos detalles se revisarán cuando el avión haya aterrizado en Chile.

De la misma manera, aseguró que el Aeropuerto Internacional de Santiago cuenta con las condiciones “de sobra” para recibir un avión como el Supertanker.